Hemos intentado un par de veces subir en coche hasta el Mont Colombier, pero la primera vez estaba nevado y era imposible llegar sin raquetas de nieve. Incluso lo intentamos en una segunda ocasión a pie pero no estábamos en forma y no llegamos.
Esta vez es la buena, es Octubre de 2014 y ha salido un día perfecto, totalmente despejado, lo cual nos va a permitir disfrutar desde allí arriba de las vistas del Mont Blanc.
La carretera de acceso al Grand Colombier llega a tener una pendiente del 20% y ha sido incluida en el Tour de Francia en el año 2012. Conocemos a un amigo que para celebrar la treintena la subió y bajó en bicicleta tres veces durante el día de su cumpleaños.
Vamos bien preparados, hemos comprado unos croissants y pains au chocolat que Castor ha completado con tazas y una botella de leche, pues ella no se anda con chiquitas.
Desde arriba las vistas son espectaculares mires a donde mires, la montaña te ofrece una panorámica de 360º incluyendo la senda por la que íbamos en la excursión que hicimos unos meses antes.
El Mont Blanc al fondo